Cuentito de la neuronita pateada 1
Una vez que la patearon hacia los confines del cerebro (porque la pobrecita no se acordaba de la palabra "Interpol") la neuronita comenzó a vagar.
Andando y andando se cansó, se sentó y tomó una siestesita (al fin y al cabo el cerebro es suavecito, el piso está como hecho d' fomi). Soñó (porque las neuronas también sueñan, y si alguna vez tienes la suerte de que todas las tuyas sueñen al mismo tiempo, sus sueños se conectan, y como están ocupadas soñando te dejan a ti sin conciencia, y es como si t' murieras, es un descanso profundo profundo, hasta que alguna d' las neuronas despierta, rompiendo l' armonía y haciéndote soñar, y siempre pesadillas porque les enoja que perturben su descanso).
Andando y andando se cansó, se sentó y tomó una siestesita (al fin y al cabo el cerebro es suavecito, el piso está como hecho d' fomi). Soñó (porque las neuronas también sueñan, y si alguna vez tienes la suerte de que todas las tuyas sueñen al mismo tiempo, sus sueños se conectan, y como están ocupadas soñando te dejan a ti sin conciencia, y es como si t' murieras, es un descanso profundo profundo, hasta que alguna d' las neuronas despierta, rompiendo l' armonía y haciéndote soñar, y siempre pesadillas porque les enoja que perturben su descanso).
Empezó a caminar de nuevo la neuronita pateada, pensando y pensando, recriminándose no haberse acordado de la palabra "Interpol", su única tarea exclusiva y no pudo con ella. Como ustedes saben las neuronas están conectadas entre ellas y funcionan como un equipo, pero a cada una (o a algunas, dependiendo de qué tan activo sea el cerebro o despistada el alma) se le asignan tareitas específicas. La de la neuronita pateada era recordar los nombres de grupos raros porque la que hospeda el cerebro es amiga de otro hospedador de cerebros que siempre le recomienda grupos nuevos, y obviamente la hospedadora del cerebro de la neuronita pateada no quería quedar como ignorante, así que las neuronitas del cerebro, en específico la ahora pateada ponen atención.
Total que anda la pobre neuronita pateada pensando y pensando y triste triste, recriminándose una y otra vez (es que la hospedadora del cerebro fue educada en la religión de la culpa, y las neuronitas a querer o no son influencidas por los contenidos de los archivos). Y empieza a llorar la pobrecita porque pobrecita de ella, no conoce esa parte de los confines del cerebro, no entiende que las otras neuronas no le perdonaran su descuido y la patearan (además le duele su culito por las patadas) Pobre pobre neuronita pateada, qué va a ser de ella. Y sigue llorando, llorando, llorando, porque pobrecita de ella. Menos mal que el piso del cerebro es como de fomi y puede descansar, soñar un ratito (que no la patean y en cambio le soban su fregado culito).
4 comentarios:
Comienzo a creer que lo del valium y el prozac es algo más que una cuenta de correo
ahhh pobre neuronita pateada, no sé al leerlo me recordaba mucho a un cronopio cuando junta sus manitas y llora... tristeza de cronopio!
jaaaaaaaaaaaaaaaaAAAAAA
ME ENCANTAS
Tienes razón Ewok, todos d' repente somos neuronitas pateadas, esa era un poco l' intención.
Y Rod... ni siquiera voy a contestar, ya deberías d' saber q' tengo pasones mentales. Visca Barça! jaja Abrasitos.
Hermosa Adrix, y el italiano?
Su Alteza felina, es un verdadero honor recibir su visita en este blog.
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