Para las brujas, el infierno

A veces uno invoca a las personas con el pensamiento.

Para muestra, el otro día que estábamos enfrente de la casa de su vecina, de repente sale al tema, y ¡zaz! que aparece. Estoy seguro de que sabías que era mi coche y por eso no volteaste.

Casi podría yo decir que esta historia fue meramenta circunstancial. Tu amigo siempre me había gustado, pero nada más... y cuando los traté un poco supe que estaría muy complacida de compartir contigo una parte de mi vida. Entre los dos me hacían reír mucho. Pero ella ya existía, y tal vez si yo no la hubiera conocido, si no supiese de cierto que lo suyo era es REAL... otra cosa hubiera sido.

"Tu estás loca, porque te gusta uno y te acuestas con el otro"

Sí, sí estaba un poquito loca en esa época, mejor dicho, un poquito hueca.

Pienso que me la pasaba tan bien contigo, que nos reíamos mucho, que nuestras pláticas profundas de hecho significaban algo. Pienso también que dormir con él siempre fue un mero consuelo y una distracción (pero ten muy claro que nunca se trató de tí).

Y es que es increíble que a pesar de que los planetas se alinearon, de que la luna estaba en la fase correcta, de que las fuerzas superiores parecían dar su bendición... no, a la hora de la hora no (y sé que pensabas en mi por las noches, y sé que te cruzó por la mente, ya lo sabía, aun antes de que me lo confirmaras). A tí te hubiera querido, lo sé, y sé que tú sabías y tú sabes que yo sabía que tu también, y que sabías de él y que yo sabía de ella.

(demasiados sabía's como para que esto me saliera tan mal)

En retro, el triángulito con dos adyacentes en el que estábamos metidos provoca carcajadas irónicas.

Al menos siguen compartiendo una cosa en relación conmigo, que pena que me tengas que odiar (aunque no imagino que otro final pudieramos haber tenido).

Oye, ¿y tu amiga?

(así preguntan por ti cuando hasta tu nombre se les atora)

Si te he de ser sincera, eres mi único hubiera.
- lo cual es extraño considerando que no te amé -